Con la llegada de septiembre y el regreso a las aulas, uno de los desafíos para los padres es preparar comidas saludables y atractivas que los niños puedan llevar al recreo. Es importante que los almuerzos sean nutritivos, fáciles de comer y, sobre todo, que les gusten a los más pequeños. En este post puedes encontrar algunas ideas de comidas sencillas y ricas que harán que tus hijos disfruten más de su pausa en el colegio.
1. Bocadillos variados
Los bocadillos son una excelente opción para la vuelta al cole, ya que son fáciles de preparar y pueden adaptarse a los gustos de cada niño. Un sándwich es una opción clásica que nunca falla, puede rellenarse con ingredientes como jamón o chorizo serrano, queso y algunas rodajas de tomate para añadir frescura. También se pueden incluir opciones más creativas, como un bocadillo de crema de cacahuate y plátano, que combina proteínas y carbohidratos saludables, o uno de hummus con rodajas de pimientos y zanahorias, ideal para quienes prefieren un sabor más salado y nutritivo.
2. Empanadas
Por otro lado, las empanadas son una opción deliciosa y práctica para llevar al colegio, ya que se pueden preparar con antelación y son fáciles de transportar. Para un toque nutritivo, se pueden hacer con masa integral y rellenarlas con una variedad de ingredientes saludables. Una opción popular es el relleno de espinacas y queso ricotta, que combina verdura y lácteos en un bocado sabroso. También se pueden preparar con carne, como salchichas y queso brie, o combinar un relleno de calabacín, champiñones y queso feta, creando un equilibrio de sabores delicioso. Para darle un extra de sabor, se puede añadir un toque de ajo picado y un poco de orégano o albahaca. Estas empanadas pueden servirse calientes o frías, lo que las convierte en una opción flexible y muy atractiva para el almuerzo escolar.
3. Wraps
Los rollitos de tortilla son una opción práctica y muy versátil para el recreo. Solo necesitas una tortilla de trigo, que puedes rellenar con diferentes ingredientes según el gusto de tu hijo. Puedes añadir pollo a la plancha con lechuga y queso, hummus con zanahorias ralladas y rodajas de pepino, o atún con mayonesa o alioli y rodajas de huevo duro. Enrolla la tortilla y córtala en pequeñas secciones que los niños puedan tomar fácilmente. Estos rollitos son perfectos porque no se desarman fácilmente y son fáciles de comer.
4. Muffins salados
Los muffins no siempre tienen que ser dulces. Los muffins salados son una excelente opción para llevar al colegio y se pueden preparar con anticipación. Puedes hacer una versión con huevos, espinacas, queso y jamón, o probar con calabacín rallado, queso feta y un toque de hierbas. Estos muffins son fáciles de llevar, no requieren refrigeración y son una buena fuente de proteínas y verduras. Además, puedes involucrar a los niños en la preparación, para que se sientan más entusiasmados por comerlos.
